Hoy en día, la mayor parte de las empresas reconoce el valor que tienen los datos para su negocio. Es más, las organizaciones son conscientes de que sólo integrando los datos en él podrán ser competitivas.
Sin embargo, convertirse en compañías 'data driven', es decir, impulsadas por los datos, no es fácil, puesto que no basta con recoger y almacenar dichos datos, sino que es necesario analizarlos e integrarlos en los procesos de negocio.
Integración de los datos
Cada vez hay más vehículos (coches, camiones, furgonetas e incluso activos como remolques o maquinaria de construcción) que son conectados con el fin de recoger datos diversos, como el kilometraje, su posicionamiento GPS, el consumo de combustible, emisiones de CO2, etc.
Pero el verdadero potencial de esos datos está en su integración con los procesos de negocio, de forma que ofrezcan un valor real a las compañías. ¿Por qué? Por dos razones.
- Porque hay datos críticos que sin la telemática se desconocen o son muy difíciles, e incluso imposibles, de obtener.
- Porque la integración permite decisiones con mejores datos, que enriquecen los indicadores que la empresa pueda estar utilizando. Entre ellos, el uso de los vehículos, los trabajos que se realizan y el personal, incluidas horas de llegada, horas de trabajo o kilometraje.
Aprovechamiento de los datos
Las posibilidades de integración de la telemática con el software empresarial son casi infinitas. Desde la gestión de activos, al CRM, facturación, comunicación entre equipos, órdenes de trabajo, planificación y optimización de rutas, aplicaciones para trabajadores móviles, nóminas y horas extra, así como un largo etcétera.
Pongamos algunos ejemplos. Hoy en día, el kilometraje es la base de muchas decisiones relacionadas con el vehículo. En cada vez más negocios estos datos de kilómetros recorridos se consiguen mediante tarjetas tipo Solred, que se integran con la solución telemática para obtener información exacta y al momento. También se puede gestionar las cargas de combustible e integrar los métodos de pago para automatizar el proceso y evitar fraudes relacionados con este tema. O conocer el coste por kilómetro de cada operación.
Planificación de rutas
Otro ejemplo interesante es el de la integración entre la telemática y un planificador de rutas. Con la geolocalización, es posible contrastar automáticamente si se están llevando a cabo las rutas planificadas en tiempo real en base a la posición de los vehículos.
Gestión de visitas al taller
Una compañía puede gestionar sus visitas al taller, los cambios de neumáticos y los mantenimientos teniendo en cuenta el odómetro y el estado del vehículo en tiempo real. De esta forma, puede ahorrar dinero anticipándose a problemas graves gracias a los diagnósticos del vehículo o realizar el cambio de neumáticos cuando sea necesario según la situación de los mismos.
Electrificación y seguridad vial
La información de los vehículos (kilometraje, consumo de combustible y emisiones de CO2) es muy útil para decidir qué parte de la flota puede sustituirse por vehículos eléctricos, teniendo en cuenta la autonomía de los que ahora mismo hay en el mercado.
También se puede mejorar la seguridad vial, conociendo qué conductores cometen imprudencias como excesos de velocidad o maniobras bruscas, o quiénes tienen malos hábitos de conducción que podrían ser corregidos. Y podría ser posible relacionar costes de accidentes con el estilo de conducción.
Nuevos desarrollos y posibilidades
La telemática no sólo ofrece muchas posibilidades hoy, sino que no deja de evolucionar para recabar cada vez más información que pueda ser útil. E incluso utiliza tecnologías como la inteligencia artificial o el aprendizaje automático para mejorar la seguridad en carretera.
Es el caso de las cámaras embarcadas, o dashcams. Webfleet Solutions ha presentado recientemente la CAM 50, un dispositivo que utilizar IA para detectar comportamientos de riesgo al volante, como la fatiga del conductor o el uso del teléfono móvil, y alertar al mismo antes de que ocurra un accidente. También graba lo que ocurre en la carretera para que sirva de prueba ante reclamaciones fraudulentas.
En resumen, integrando la telemática en los procesos de negocio se posibilita una mejor toma de decisiones, se impulsan los resultados de la empresa y se permite gestionar más, con menos esfuerzo y con datos más precisos. Gracias a la telemática se hace más, con menor coste y con un análisis más sencillo y exacto que con distintas fuentes de información inconexas. Aprovechar los datos de los vehículos es la base para tomar decisiones más inteligentes.