La tecnología está cambiando todos los ámbitos de la logística, hasta el punto de que, en los últimos años, se ha asistido a toda una revolución en el sector basada en la innovación y los datos. Las empresas de paquetería y mensajería se encuentran ante una oportunidad única para dar un salto adelante en su eficiencia y su productividad, pero para ello deben saber cómo pueden aprovechar los avances que ya están en marcha.
Los clientes tienen hoy a su disposición tecnología que les permite adquirir productos cualquier día de la semana y a cualquier hora del día. Pueden hacerlo, además, por medio de diferentes canales y dispositivos gracias a la omnicanalidad. A esto se le suma que las entregas pueden darse en la vivienda, en puntos de recogida, oficinas y un largo etcétera. Todo ello se traduce en un gran reto para las empresas de paquetería, que tienen que realizar entregas adaptadas a esos pedidos. El auge del comercio electrónico, que en Europa ha aumentado un 13,6% entre 2018 y 2019, según el European Ecommerce Report 2019 de la Ecommerce Foundation y Eurocommerce, ha multiplicado las exigencias de competitividad. Prueba de ello es, por ejemplo, el incremento de franjas horarias de entrega. Y a estas dificultades hay que sumar las de la optimización de la última milla.
Estas son algunos de los modos en los que las empresas de paquetería y mensajería están mejorando sus servicios y adaptándolo al nuevo contexto del mercado.
Planificar con acierto es una parte clave en el intento de mejorar la productividad de nuestro negocio. Y la tecnología ya permite hacerlo. Esa planificación incluye determinar qué recorrido debe realizar cada vehículo para gastar menos gasolina, o evitar retenciones y restricciones de circulación. También, elegir el vehículo más adecuado para cada clase de mercancía (material frágil, productos refrigerados, etc.), y para desplazarse; por ejemplo, algunos paquetes será más eficiente entregarlos en furgoneta y otros puede serlo entregarlos en motocicleta de reparto. Cuando un mismo vehículo realiza entregas de distintos paquetes en varios destinos, es imprescindible sacar el máximo rendimiento a tus rutas para no realizar kilómetros de más.
Los seguimientos de las entregas hace tiempo que dejaron de hacerse de manera telefónica, llamando desde las oficinas de la empresa a los transportistas. Gracias al rastreo por GPS, ahora es posible saber con exactitud y en tiempo real dónde se encuentra cada vehículo, cada conductor y cada mercancía. De esta manera podemos averiguar si se está cumpliendo el horario previsto, si el vehículo se ha desviado de la ruta óptima, o si se ha producido cualquier incidencia imprevista. El rastreo por GPS tiene el doble valor de habilitar que los clientes puedan saber dónde se encuentran sus paquetes, y hacer así una previsión de cuándo estar en casa para recibirlos. Esto redunda en una mejora de la experiencia de compra del cliente.
Si acortar la distancia recorrida es clave y uno de los indicadores básicos en la gestión de flotas, también lo es el plazo de entrega de las mercancías. La tecnología evoluciona sin parar para proporcionar estrategias de entrega más rápidas, algo que se ha convertido en todo un desafío dado el gran volumen de entregas que deben realizarse cada día. Las herramientas de planificación de rutas optimizan los recorridos acortando plazos y de manera automática, de manera que los conductores no tienen que introducir manualmente cada destino.
Utilizar estos dispositivos sin tripulación para suministrar pedidos ya no es ciencia ficción, y el reto del sector del transporte es explorar sus ventajas hasta difundir su uso al día a día. Grandes corporaciones como Amazon ya han puesto en marcha varios proyectos de reparto con drones, y es de esperar que pronto se conviertan en habituales. El uso de estos vehículos por parte de las empresas de paquetería les permitirá proporcionar entregas mucho más rápidas y ajustadas a una hora concreta. Por otra parte, es un medio económico, que ayudará a reducir los costes de una empresa (en especial el de combustible), y poco contaminante.
La integración que ofrecen las nuevas tecnologías de gestión de flotas es muy útil para dejar de una vez atrás la documentación en papel y ubicarla en la nube. Allí puede ser utilizada de un modo mucho más eficiente, ya que no se deteriora ni se extravía. Además, puede ser compartida y actualizada al mismo tiempo tanto desde las oficinas de la empresa como por parte de los conductores profesionales, lo que agiliza numerosas gestiones de carácter administrativo. Además de la documentación, la tecnología permite a los transportistas incorporar los datos de cada repostaje de carburante, ya se produzcan mediante tarjeta de combustible o en metálico.