Uno de los grandes problemas que representa vivir en una ciudad grande es la cantidad de personas que se desplazan al mismo tiempo por sus calles y avenidas; esto acaba provocando a las empresas con flotas de vehículos pérdidas económicas.
Una gran ciudad, equivale a muchos negocios con flotas de vehículos. Cuantas más personas, más vehículos y por lo tanto, más tráfico. Tantos vehículos, más los personales de cada ciudadano, provoca embotellamientos habituales a lo largo del día. Para las empresas con flotas de vehículo, este tráfico causa grandes pérdidas económicas registradas en millones al año.
El coste del tráfico
Por lo tanto, si hacemos un análisis de las empresas de gestión de flotas de vehículos nos daremos cuenta de que el problema del tráfico está directamente ligado a su rentabilidad. El tiempo que sus unidades pierden en las calles de la ciudad tiene un impacto negativo en su facturación: combustible malgastado, aumento de los costes de mantenimiento, llegando trade a las citas, perdiendo la efectividad de sus trabajadores y en cierta medida decepcionando a sus clientes.
Pero, el tiempo dentro de un embotellamiento no solo genera perdidas económicas, también se dan otras causas que pueden tener consecuencias negativas. El tráfico genera ansiedad, depresión, agresividad. Cada día se hacen más comunes escenas de pleitos en la calle, ya sea entre coches, motos, ciclistas, peatones, o patinetes.
Este fenómeno de violencia a su vez tiene repercusiones psicológicas que pueden afectar la relación de los conductores tanto en el hogar como en el trabajo. Un conductor estresado es muy probable que baje su productividad. Si baja su rendimiento, la empresa entonces enfrenta una problemas de rentabilidad y como consecuencia, el trabajador tendrá pérdidas económicas.
Otro riesgo que corren los conductores de algunas ciudades cuando se encuentran atrapados en un embotellamiento es el de ser víctimas de la delincuencia. Cada vez se oyen más casos de asaltos en vías “rápidas” que pueden llegar al extremo de costar la vida a quienes pongan resistencia. En estos casos las pérdidas para la empresa pueden dispararse de una forma significativa.
Por ello, hay que tomar medidas para reducir estas pérdidas económicas y personales que se generan en estas escenas tan habituales en las grandes ciudades como puede ser el tráfico.
La solución
Algunos estudios independientes muestran que el consumo de combustible y el mantenimiento engloban el 30% de los costes operativos de un vehículo comercial. Además, estos gastos no solo tienen relación con el tiempo que pasa desde que se enciende el motor hasta que se apaga, también tienen relación directa con el estilo de manejo de los conductores o la ruta seleccionada.
Teniendo estos puntos controlados, es muy probable que se pueda contribuir de buena forma en mejorar el servicio, aliviar el coste de la propiedad y el estrés, bajar el número de accidentes e inclusive, reducir la huella de carbono y dar una mejor imagen al negocio.
Estos datos, le dan a las empresas con gestión de flotas una idea de dónde tienen que poner especial atención para aumentar su rentabilidad. Pero, para poder registrar estos datos y que nada se pase por alto; es muy importante que las empresas con vehículos se apoyen en un software de gestión de flota vehicular.
Con la ayuda de estos sistemas, se podrá controlar todas las actividades y gastos de los activos y las empresas podrán llevar a cabo una gestión más eficiente. Se registrará la información y se podrá analizar al momento, tomando decisiones más rápidas y mejores que acaben aumentando la rentabilidad de la flota y en consecuencia, del negocio.
Por lo tanto, para optimizar una flota de vehículos es muy importante no dar nada por hecho y tenerlo todo controlado. Y en cuanto al tráfico o las malas rutas, las situaciones de estrés o peligro entre los conductores, o los gastos innecesarios de combustible o mantenimiento, entre otros; es cada vez más necesario e imprescindible, que las empresas con flota de vehículos se adapten a las nuevas tecnologías y se apoyen en el software de gestión vehicular que mejor se adapte a sus necesidades. De esta manera se reducirán las pérdidas y se aumentará el rendimiento.