Hablar del tema de mantenimientos en una flota, es difícil de cara hacia dentro de una empresa. Se trata de tener activos en buen estado que nos ayuden a no tener imprevistos adicionales para coordinar entregas o llegadas según sea el caso del objetivo de nuestra flota.
Pensar en mantenimientos siempre tiene dos vertientes: aquellos que se hacen porque algo se rompió y debemos arreglarlo; que son los correctivos, pero también están aquello que debemos programar para evitar que el vehículo se averíe, que son los preventivos.
Si como meta nos trazamos la reducción de los mantenimientos correctivos en relación con los mantenimientos preventivos, lograremos tener los vehículos programados para entrada en mantenimiento y evitaremos afectar los horarios y tiempos de utilización del vehículo. Además, adicionalmente se podrán priorizar las averías, lo que permitirá evaluar si es necesario auditar esos mantenimientos, es decir, ¿se ha producido, en realidad, por una mala utilización del vehículo? Y en el caso de que tenga vehículos iguales, ¿han presentado la misma falla en el mismo tiempo de utilización?, ¿puedo averiguar si alguna de las piezas dura menos de los estimado en libros? De esta manera, también se puede predecir mantenimientos preventivos para otros vehículos de la misma gama.
Un punto también importante es auditar la frecuencia con la que suceden estos mantenimientos y los proveedores a dónde los enviamos. Esto nos dará respuestas más acertadas de que está pasando y si en realidad estamos, por lo menos, en el punto de equilibrio con cada vehículo o será necesario pensar en vender.
Los mantenimientos preventivos constan de acciones rutinarias. Pueden estar determinadas por el tipo de vehículo y su utilización, y por eso es importante saber:
¿Cuál debe ser la estrategia de ejecución de nuestros mantenimientos preventivos?
Debemos partir de que queremos aumentar la disponibilidad y para ello tendremos que ser muy estrictos en la calendarización de los mismos y ejecutarlos a tiempo. Si nuestra estrategia va de reducción de costos, debemos conocer el tiempo establecido de vida útil de las piezas que normalmente requieren reparación, sin embargo, es importante tener una clara evaluación de lo que representa la reducción de costos.
Hay que evaluar los pros y los contras de hacer o evitar un mantenimiento por costos o por flujo de caja; ya que esto puede derivar en arreglar una o varias piezas adicionales, que representen mayor inversión en la reparación.
Bien es sabido que, un mantenimiento preventivo normalmente requiere parar la operación para poder realizar la tarea. Esta es una estrategia que debe llevar mucho más estudio ya que el mantenimiento no debe afectar a la operación. Existen mantenimientos que deben hacerse para cumplir ciertos parámetros legales, por ello, es importante que tengamos medida la utilización de este vehículo para poder enviarlo a mantenimiento y no tener que pagar multas qué representan disminución en la ganancia que el vehículo nos genera.
En conclusión, para que podamos tener una estrategia óptima de mantenimientos preventivos, necesitamos que el vehículo cumpla con disponibilidad para realizarlo, fiabilidad del taller al que está entrando para que tengamos confianza en los tiempos que tardaremos en ello, y una correcta evaluación de costos para realizarlos.
Y nunca descartes, en un primer momento, la idea de evaluar la renta de los vehículos propios en relación con los costos de mantenimientos fijos. Importante si nos decantamos por este punto. Hay que evaluar varias realidades como: si en realidad disminuye costos, si son flexibles en pagos, ¿qué tipo de alcance tienen los contratos?, el tiempo promedio que deben hacerse los mantenimientos y, ¿qué pasa si no nos entregan a tiempo el vehículo? También es muy importante hacer énfasis en saber qué tipo de materiales utilizan.
Y por supuesto, en último punto, pero con la misma importancia que los anteriores, ¿mis conductores en qué porcentaje son responsables de estos mantenimientos?, ¿cada cuánto los capacito?, ¿qué tipo de ejercicios de buen manejo e información del vehículo reciben antes de tenerlo en sus manos?
Si el vehículo es uno de tus principales activos en la empresa no olvides que el mantenimiento preventivo es una inversión. Y si finalmente te decides por seguir esta estrategia; también te puede interesar conocer qué pautas debes seguir para crear un plan de mantenimiento preventivo.